Escrito por Eduardo Jibaja, Presidente de la Asociación Cultural ARI, KANAN. Marzo,1977.
«…Digo que Antenor Samaniego es trabajador constante. Desde hace muchos años mantiene inalterable su producción artística. Repite con César Vallejo: hay mucho que hacer, y lo hace. Unas veces trata novelas, otras cuentos; emprende ensayos, teatro, textos escolares; y, entre todo, nos entrega poesía. Todo ello nos dice que Samaniego personifica a ese tipo de escritor sin reposo, sin tregua y hasta sin escarmiento, aquí donde escribir duele, y duele más escribir para que no te lean, o que te lean las gentes del primer grupo, aquellos que, a veces, no perdonan el talento ajeno (ojo, se refiere a los críticos de poesía que ejercen este oficio con mayor o menor rigor científico, hasta codificar – a veces, hasta momificar- al artista).
Respeto fraternalmente a Samaniego como poeta y como profesor de la Universidad Nacional Federico Villarreal. Fue de los maestros que estuvo entre los primeros que dimos vida y tarea a esa institución de docentes que lleva el nombre de ARI, KANAN… (él propuso ese nombre, era el único que hablaba quechua cuando nació la Asociación Cultural Universitaria ARI, KANAN, allá en setiembre de 1975. ARI, Sí…KANAN…Ahora, dándole sentido a que las cosas hay que hacerlas ya, ahora, sin esperar hasta mañana. «