VI
¡Ahora sí, soltadle las palomas!
¡Qué los caballos de la espuma
que llegan de la bruma
retocen en las vegas y las lomas!
Propicien el danzar Murillo y Goya.
¡Venid corriendo, mozas andaluzas
y soltad de las blusas
los senos nacarados como joyas!
¡Soltad a todo viento cabelleras!
¡Danzad, y el ritmo acompasado sbre
de vuestra piel de cobre
la alegría ritual de las caderas!
Dichosa es la mañana y es dichosa
la sombra de Platero que recorre
del breñal a la torre
llevando en el hocico alguna rosa..
Este es don Juan Ramón… Vedle en el friso.
Desvanecióse en él toda la pena.
Su barba nazarena
es una hermosa flor del Paraíso.