Poeta: árbol azuloso en los obscuros limos de la Muerte
nutrido de la pálida savia de la tristeza,
sólo se exprime de tus poros la angustia de tus sueños,
mientras que dentro del cráneo un insecto de fósforo
te devora toda la cal.
Minúscula migaja de la carne del Universo,
circula por tus huesos i red de capilares
la sangre azul del cosmos i se filtra en flexibles
palabras que se curvan como el aire
¡remanso de espigas de los astros rosados!
Poeta: que el mundo –tu dominio- es apenas
un diminuto corpúsculo en el naufragio eterno
del polvo en la marea del Misterio.
Que tu corazón levadura de lágrimas
llueve en el ánfora de sombras de la Muerte.
Poeta:… I me siento como una gran herida en llamas
abierta en el costado izquierdo de la Vida.