Solípedo divino hecho ex profeso
para el servicio de héroes y de dioses.
¡Qué poderío el de los pies veloces
de este heredero de Quirón y Neso!
Otea el cielo azul cual si añorara
su procedencia astral. ¡Cuán estupenda
su plástica figura de leyenda,
su cuerpo esbelto en mármol de Carrara!
La oreja erguida: apéndice o antena
captando al remotísimo mensaje
de Diómedes, de Aquiles y de Helena…
O recuerda quizá a Pentesilea
que le tiñó de púrpura el pelaje
cuando cayera en la épica pelea…