Finge en la sierra exótico arabesco.
Del follaje espinado –azul de hielo-
insurge el tallo dibujando un fresco
en el telar albísimo del cielo.
Danza neurótica de amaros tiernos
la ramazón total. Delirio o fiebre
de ideas en desorden de un orfebre
que talla en oro pétalos de infierno.
Frenética irrupción de una importuna
serenata inmoral que el diablo eleva
hacia el huerto de lirios de la luna.
Los puños, al abrirse, aun tienen rastros
de desgarrones…Dejan en la gleba
llover jirones de oro y alabastros.