IX

CUAJA en crisoles dorados
su luz la joya del sueño.
La rosa azula sus hojas
en el rocío del cielo.

Los leñadores del bosque
labran las ramas del viento.
Altos caballos de sombra
comen jazmines de niebla.

Sobre tejados y muros
se extiende un azul Olimpo.
Es el estío que pasa:
manantial de oro y de vino…

Muelles, bajíos, robredos
hojosos, helechos blancos…
En el pomar está quieta
la soledad de cada árbol.

Crujen vitales las flores;
y allá, violines de lumbre
sobre el cristal de las fuentes
el oro del sol difunde.

Esta estación colorida
viste de tul y azahar…
Se está quemando de besos
debajo del limonar…

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